miércoles, 3 de junio de 2009

Baja de la acera

Parece que el último verdades a medias está pidiendo un hueco propio donde poder responderlo.
Aprovecho para recolgar el comentario del colectivo zombra:
 
"Cada vez que visitas Al rebullón y no dejas un comentario un ciclista se sube a la acera harto de que los coches le piten con prepotencia mientras llenan de humo y ruido una ciudad que es también tuya y es también mía, un repartidor para en doble fila y el ciclista debe salir al tercer carril estropeando la vuelta rápida que pensaba conseguir aquel taxista, un 4x4 decide aparcar sobre esa extraña pista verde con bicicletas dibujadas, un urbanista decide que el 4x4 hizo mal aparcando en aquel trozo de carril bici ya que ése sería un lugar estupendo para plantar una parada de bus o un contenedor de reciclaje (que es que el mundo hay que cuidarlo), un autobusero entiende que merece la pena acelerar brutalmente en tan sólo treinta metros para conseguir adelantar al ciclista que va por la calzada y llegar dos segundos antes a la debida parada (entonces será el ciclista quien pueda descansar respirando sus cálidos humos allá atrás, los del autobús y los del autobusero). Cada vez que visitas Al rebullón y no dejas un comentario un concejal-a de Urbanismo de una gran ciudad con casi un millón de habitantes entiende que después de un ecológicamente desastroso dragado para dejar navegable al padre río que atraviesa la urbe, después de esta barbarie decía, entiende que no tiene sentido escuchar la voz tranquila pero persistente como ola de mar que hace el colectivo ciclista en la ciudad y qué para acallar ese empuje de sostenibilidad ciudadana no habrá que impulsar un carril bici paralelo al trazado del tranvía conectando los viales verdes circulares que ya sirven de sobra para no comunicar ningún sitio con ninguna parte (para qué hablar de intentarle hacer entender la diferencia entre carril-bici y acera-bici). Cada vez que que blablabla… un niño-niña ve a un ciclista en la acera y le sonríe pero el ciclista no le responde con una sonrisa, maldito ciclista que ha invadido la acera poco importa si por miedo, comodidad, cobardía o inseguridad, el nauseabundo ciclista movido por este drama de ira y tensión que comenzó, quizás, cuando tú no dejaste un comentario en este blog, no va a responder a la niña-niño devolviéndole la sonrisa y haciendo sonar nuestro ridículo timbre de automóvil ecológico, no, el sanguinario ciclista abrirá la boca y engullirá al infante de un solo bocado mostrándole antes sus fauces cariadas y después amenazará con sonrisa de hiena a la anciana que ha visto como su nieta- o era devorada-o por uno de esos ciclistas contra los que descargamos un extraño odio recíproco que puede hacernos añadir el título de muy gilipollas a los de muy noble, muy leal, … ciudad de Zaragoza.

Puede que el asunto se resuelva de una forma más sencilla, dejando un comentario en vuestro blog por ejemplo, y puede que a la vez esta masa crítica que tú y yo ya somos, sea capaz de hacer prevalecer una muda ley de cooperación y respeto hacia el más débil que nos acompaña como humanos, y entendamos así que en la calzada al ciclista respeto máximo y en la acera primero y ante todo el peatón.
Besos a pedales."

1 comentario:

Abel dijo...

Apoyo a los ciclistas que se lo curran y quieren hacer ver al resto de vehículos que somos uno más en la calzada. No apoyo, ni lo haré, a los que en su vida han cogido una bici, y como ahora mola, se suben a la acera, que es de los peatones y no se bajan de la bici ni cuando el sitio es estrecho y no respetan ni a dios. Las bicis son vehículos, y deben ir por la calzada, o por el carril bici, si hubiera o hubiese, que también opino que nunca debería haberse subido a las aceras. Y si no se sabe ciclar así o les da miedo...que aprendan primero en el parque, como hemos hecho todos, o vayan andando. No recuerdo a ningún holandes subido a la acera con la bici...ostias!!!!