... te hace sentir diminuto, casi invisible. Este fin de semana tuvo el privilegio de disfrutar de unos de esos días mágicos,en los que el cierzo se alía con el montañero y los Pirineos se muestran en toda su grandiosidad.
Un espectáculo maravilloso.
SALUDos
4 comentarios:
Que cabrón. Yo me raje en el cresterio hace un mes porque me daba canguelo.
Abrazos.
joer que machote... asi que subiendo al pirineo y sin avisar.... foto impresionante. a ver cuando te subes por estos valles a visitarme
Impresionante, llena todo el escritorio de aire puro.
Esa foto merece ser enmarcada (y el espíritu tambien)
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