Quizá no sea muy conocida por muchos de vosotros, ya que en nuestra tierra, eso de hacerse famoso escalando montañas parece que queda reservado para los "chicarrones" del norte o para los militares de alto escalafón. Esta oscense de 35 añitos, se ha embarcado junto con Miriam Marco en un ambicioso proyecto de escalada y aventura llamado HuEllas. Acaba de volver de la Patagonia y Heraldo de Aragón le ha hecho un espléndido reportaje, que a continuación os detallo, para que conozcáis un poco más la trayectoria de esta increíble escaladora y paisana:
La escaladora aragonesa Cecilia Buil ha regresado maravillada de la zona de la Patagonia donde ha escalado el Cerro Torre que incluyó en el programa HuEllas tras explorar las rocas en el Karakorum pakistaní. Patagonia era el gran territorio desconocido para Cecilia Buil. Su dilatada experiencia en el mundo de la escalada nunca le había llevado a este inhóspito rincón donde las borrascas del Antártico son permanentes compañeras de las expediciones. La altoaragonesa quería ir, "cuando dejara de escalar, porque allí se portea mucho", afirma a su regreso. Incluyó Patagonia en el proyecto HuEllas, después de explorar paredes en el Karakorum pakistaní. Hoy, es una enamorada de la Patagonia. Ha regresado maravillada de este rincón austral. Cercano y escondido de la civilización, tiene claro que volverá. El cuándo está por determinar, aunque previsiblemente será el próximo año.
El proyecto HuEllas contempla la escalada de paredes vírgenes, de las que apenas hay documentación. Y hacerlo sin dejar precisamente huella. Se trata de escalar de la forma más natural posible. En el mes y medio que ha estado en la Patagonia ha podido ver de cerca la zona de las torres del Paine, la del Fitz, Cerro Torre… "Ahora ya puedo elegir mejor y sé cómo funciona todo allí. Me han quedado muchas ganas de volver. Lo he pasado bien, es un sitio donde lo he pasado bien y volveré", afirma. La escalada a Cerro Torre estaba excluida del proyecto HuEllas, pero su atracción es brutal. Se trata de una pared muy difícil debido a las circunstancias en las que se ve inmersa las montañas de la Patagonia. Rachas de viento que llegan a los 100 kilómetros por hora y temperaturas por debajo de 0 grados. La sensación térmica es de un frío intenso por debajo de lo que marca el mercurio. El hecho de que sea una zona casi permanente de borrascas impide ventanas de buen tiempo para permitir el trabajo de los escaladores, intenso, además, debido a que se aprovechan al máximo las horas de luz que en esta época del año suelen ser unas 20. Cerro Torre estaba marcado en la agenda de Cecilia Buil, pero no para ahora. Quien fuera una de sus mejores compañeras de cordada, Roberta Nunes, que falleció el año pasado en un accidente de tráfico en Yosemite (Estados Unidos), siempre le hablaba de ir allí y Cecilia Buil lo posponía por el Himalaya u otras cordilleras en territorios con más nombre. En Patagonia, la recuperación de los montañeros es mejor que en otros puntos de la tierra.
El hecho de que esté cerca el pueblo de El Chaltén te permite recuperar "física y psicológicamente muy bien. No es como en Pakistán que tienes que volver al campamento base, comes mal… Allí, en El Chaltén hay más gente, se come bien, hay fiestas…", señala la escaladora altoaragonesa. Eso sí, la montaña es tan inhóspita como la del Himalaya, aunque si no tiene el mismo nombre es porque le falta la altura que posee la cordillera asiática. La clave en Patagonia es tener paciencia y un poco de suerte. Cecilia Buil conoció a montañeros con 15 intentos al Fitz Roy. Y mientras las ventanas están cerradas la otra opción es disfrutar de la zona hasta que puedes subir "lo que es un regalo y es precisamente eso lo que hace que tenga tanto encanto". De la experiencia en la Patagonia, Jesús Bosque ha filmado a Cecilia escalando la aguja Guillaumet. El ascenso a Cerro Torre lo intentó con el montañero italiano Marcello Comicetti, y tuvieron que abandonarlo debido a las malas condiciones atmosféricas y a la nula seguridad de que los partes favorables fueran fiables. La agenda de Cecilia la llevará en febrero a Noruega, a hacer escalada en hielo que le sirva para aclimatarse a la expedición que tiene previsto hacer en mayo en Alaska. Según recoge su página web, la expedición será al glaciar Ruth, que en su recorrido ha esculpido paredes de granito, corredores y aristas como el Mount Barrill, Mooses Thooth, Eye Thooth, Sugar Thooth. Con alturas cerca de los 3.000 metros y paredes de roca de hasta 900, es un lugar muy apreciado por los alpinistas. El potencial de aperturas aún es enorme, habiendo posibilidades de abrir líneas en hielo o mixto de hasta 1.200 metros de desnivel.
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