sábado, 25 de agosto de 2007

Sin voz

La democracia tiene un fallo básico: la opinión de algunas personas no puede ser tan importante como la mía.

A mí también me parece una barbaridad esto. Más que nada por la incompetencia que se adivina detrás, el puente necesita un arreglo y a la margaritifera no se la va a extinguir por esto (Es una almeja de río, incultos. Leed el link.). Pero si para protestar tengo que ir de la mano de alguno de los que opinan aquí o aquí, yo paso.

Y es con todo igual. A la que alguien alza la voz para denunciar algo, no tenemos que esperar mucho para que alguno de los grupos de opinión lo acojan en su seno. Se mezcla un poco con otros temas, se agita y se sirve bien calentito por la tele a la hora de comer. Y mañana ya encontraremos otra cosa. Como viles sindicatos mayoritarios.

Dios, he puesto seno. Se me van a echar encima las feministas.

Dios, he puesto dios.

1 comentario:

Abel dijo...

Vaya par de páginas extremas nos pones en el post. Da miedo cualquiera de las dos, aunque me inclino más por la de la contracorriente, que la de libertadigital me da mucha risa.
Curioso post, de todas formas.
Ah, por cierto... ARRIBA LA MARGARITIFERA LIBRE!!!!